Dos programaciones
organizadas por el Sindicato Químicos Unificados y que fueron desarrolladas
ayer (29/01/09) alcanzaron los objetivos esperados. Por la mañana, en el Gimnasio
de la UEPA – Universidade Estadual do Pará (Universidad Estatal de Pará), el
desafío de la clase trabajadora de reorganizar los movimientos sindicales y
populares fueron enfrentados y hubo avanzos. Ya por la tarde, las luchas de
resistencia al neoliberalismo en América Latina atrajeron un público bastante
joven y algunas propuestas de acciones han sido aprobadas.
La unidad en la lucha
Actividad hace
avanzar la reorganización de las entidades
La oficina “La Crisis
Económica Mundial, los Desafíos de la Clase Trabajadora y la Reorganización de
los Movimientos Sindical y Popular” tenía
como base debatir la unidad en la acción de los trabajadores, en medio
de una crisis económica mundial, y definir caminos comunes de resistencia y de avances
en conquistas.
Al final de los
trabajos ha sido aprobado resistir a los efectos de la crisis económica
internacional sobre la clase trabajadora; fortalecer las iniciativas de lucha
contra las dimisiones; reducción en los salarios y de derechos, como huelgas y
ocupaciones, además de otros; no aceptar cortes de inversiones en políticas
públicas por los gobiernos y fortalecer las movilizaciones por medio de los
movimientos sindicales, sociales y populares. También ha sido aprobado
organizar en todo el país comités de luchas contra el desempleo y de defensa de
los servicios públicos.
Encuentro nacional
Para mantener el avance
en esta reorganización, ha sido aprobado en realizar un seminario en el mes de
abril y de un encuentro nacional en el último mes de 2009.
La programación ha
tenido la participación aproximada de 1.200 militantes políticos integrantes de
la Intersindical, Con luchas, MTL, MTST, MAS y Pastoral Operaria. Se
encontraban muchos invitados de Colombia,
Argentina, Costa Rica, Alemanía, Haiti, Francia, Venezuela y México.
Al final de los trabajos
los participantes hicieron una
movilización invadiendo las principales avenidas de Belém, haciendo un protesto
contra las demisiones de trabajadores echando la culpa a la crisis económica mundial.
La lucha rejuvenece en América Latina
La actividad “América
Latina: Resistencia al Neoliberalismo y Construcción de Alternativas Anticapitalistas”
además de programar una serie de acciones entre los sindicalistas de diversos
países de la región, también sorprendió por el gran número de jóvenes que se
muestran interesados en el tema, pues eso hace rejuvenecer y revigorar las luchas
contra la explotación e imperialismo de los llamados países de Primer Mundo.
Sala queda llena
con el debate acerca de las luchas en América Latina
Estuvieron presentes
sindicalistas de los países de: Argentina, Ecuador, Venezuela, Colombia y
Brasil, además de alemanes y suizos. Según las declaraciones, las políticas de
exploración, falta de respeto a las leyes de los países y la dignidad de los
trabajadores son comunes para las multinacionales que buscan “fuerza de trabajo
barato” en el llamado País de Tercer Mundo. Y en todas las empresas, la actual
crisis económica es justificada para tentar reducir los derechos, disminuir los
salarios y provocar dimisiones en masa.
En
Colombia, asesinatos
En Colombia la
situación es más grave, pues allá se llevan a cabo constantemente casos de
agresiones, desapariciones y asesinatos de sindicalistas y de líderes de los
movimientos populares, siempre llevados por las fuerzas paramilitares al
servicio de las empresas y del gobierno.
Para obtener mayores
informaciones acerca de la situación de los trabajadores y sindicalistas en
Colombia, de las diversas formas que afrontan con los derechos humanos practicados
por las multinacionales, ingresa por el sitio: http://www.sinaltrainal.org/
, Dirección del sitio del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria de
Alimentos en Colombia.
Propuestas aprobadas
Por último fueron aprobadas las propuestas de
crear una agenda para programar
encuentros más frecuentes para discutir las cuestiones, así como para
preparar un calendario de manifestaciones unitarias, simultáneamente en
diversos países contra una determinada empresa multinacional o grupo de la
representación