La crisis económica internacional comenzó con el retraso de pagos de los
tomadores de financiamientos inmobiliario en los EE.UU., en la mitad do año pasado.
Una bola de nieve se fue dispersando.
El movimiento partió de las financieras, que vendieron los papeles de esas
deudas para todo el sistema financiero internacional. Los especuladores están
huyendo de los riesgos (las bolsas caen). Y, con miedo, hoy nadie quiere
emprestar.
En el sistema capitalista, el crédito es el motor que posibilita nuevas
inversiones y nuevos empleos. En esa crisis de retracción del crédito, ningún
país está completamente libre, a pesar del discurso del gobierno de que
estaríamos inmunes.
Para entender mejor lo que esta pasando con la economía mundial, el Periódico
de Unificados entrevisto a la Sra. Denise Lobato Gentil, profesora del
Instituto de Economía de la Universidad Federal de Río de Janeiro.
Para ella, habrá más desempleo y pérdida del poder de compra de los salarios. El
gobierno podría hasta podría intervenir para reducir los efectos de la crisis,
pero debería actuar muy rápido.
Por otro lado, la profesora dice que la crisis puede abrir nuevas perspectivas
para los os trabajadores(as), que siempre pagarán la cuenta en el sistema
capitalista.

Bolsa de Valores de São Paulo durante la caída de 6,7% del índice
Bovespa debido a la conmoción en el sistema financiero causado por la crisis económica en los Estados Unidos (foto:
Fernando Donasci/Hoja Imagen)
ENTREVISTA
Menos
empleo y salario
Periódico de Unificados – ¿De qué forma la crisis económica internacional
mueve con el bolsillo del trabajador en Brasil?
Gentil – Como la economía mundial pasará por una desaceleración, el
efecto inicial será la reducción de los puestos de trabajo en el sector de
exportación. Pero, si el gobierno actúa con rapidez y toma las medidas de
política económica adecuadas, el dinamismo del mercado interno podría
compensar, por lo menos una parte, la pérdida de empleo inmediato.
Medidas como la reducción de los intereses, mayor oferta de crédito para los
productores y consumidores, reducción de impuestos en sectores estratégicos,
aumento de las compras del gobierno y de las transferencias de renta de la
seguridad y del programa bolsa familia pueden tener poderosos efectos para
evitar que la crisis afecte el país de una forma más severa. El gobierno
necesita de señalar para los empresarios y para toda la sociedad que hará lo
que fuese necesario para asegurar el mantenimiento del empleo de los brasileños.
Otro problema para los trabajadores es que la desvalorización cambial va hacer que
los precios suban y eso hará con que reduzca el poder de compra de los salarios.
En un período de bajo dinamismo económico y elevación de costos de producción,
va haber poco espacio para reivindicar reposición de pérdidas con la inflación.
Pero, de nuevo aquí, hay de cómo contornar el problema, si hay una buena
política de intervención en el mercado para controlar el cambio y en el límite,
impone controles acerca de la salida de dólares del país.
Periódico de Unificados – ¿El gobierno brasileño ha anunciado medidas
para combatir la crisis? ¿Cómo las medidas a ser tomadas pueden afectar a los
trabajadores?
Gentil – Para evitar la crisis del sector exportador, el gobierno esta
usando parte de las reservas internacionales del país para ser utilizadas por
bancos que financian el comercio exterior brasileño. También ha determinado que
el BNDES libere más de R$ 5 miles de millones para las líneas de crédito
destinadas para las empresas exportadoras.
El Banco Central redujo el recogimiento del depósito compulsorio de los bancos,
para que ofrezca más crédito y también entro en el mercado vendiendo dólares
para evitar una grande subida del cambio.
Todas esas políticas son importantes y correctas, más son puntuales, paliativas
y de efectos indirectos y poco previsibles acerca del conjunto de la economía. Todo
depende de la reacción de los especuladores y de los bancos. Lo que necesitamos
es reivindicar una actuación rápida con políticas adecuadas en la dirección del
mercado de trabajo, para minimizar los efectos de la crisis sobre la grande
mayoría de la población.
El FMI prevé, para Brasil, un crecimiento de 5,2% en 2008 y de 3,5% en 2009,
superiores de la media de América Latina por la primera vez en varios años. Estamos,
pero, en una situación en que las previsiones son un juego de palabras y
números inútiles.
Periódico de Unificados – ¿Esa crisis capitalista apunta para la superación
de que se trato de llamar de neoliberalismo?
Gentil – Es muy temprano para decir que la gestión liberal del
capitalismo cayo por tierra abajo con la crisis. Cuando la crisis llega, nadie
más quiere ser liberal, todos piden la intervención del Estado, porque el
mercado sólo no encuentra salida para la situación caótica que generó.
Mismo así, las principales características de la gestión liberal del
capitalismo permanecen, porque la intervención estatal puede ser poco
significativa y pasajera. La situación actual puede producir el efecto
pedagógico de propiciar el cambio de las políticas monetaria y fiscal restrictivas
y dar curso a las políticas industriales y agrícolas que proporcionen la
atención de las necesidades de la población.
Las crisis económicas internacionales de 1929 y de los años 1970 provocaron una
reacción creativa en Brasil. Fueron implantadas directrices industrializadas y
desarrolladoras, con una fuerte presencia del Estado. La salida para la crisis
actual puede ir más allá, proporcionando desarrollo con justicia social. Eso
podría abrir nuevas perspectivas de futuro para aquellos que siempre pagaron la
cuenta de los éxitos y falencias del capitalismo.